Con Cartografía Literaria, queremos aportar al desarrollo de la idea surgida en el taller de escritura creativa de la Biblioteca Pública Piloto dirigido por el escritor Juan Diego Mejía. Busca rastrear aquellos lugares de Medellín que han sido inmortalizados en la literatura.
Un paseo por La Playa
La Cartografía literaria indagó en la biografía novelada de Pilar Lozano, Manuel Uribe Ángel: el médico y geógrafo, para hallar una preciosa imagen que pinta lo que fue el centro de la ciudad y deja en evidencia la transformación acelerada de una urbe que guarda recuerdos en sus entrañas.
Cementerio Universal: patrimonio y memoria
La Cartografía literaria encontró en la novela de Juan José Hoyos, El cielo que perdimos, un fragmento que referencia un lugar de Medellín que hace parte de la historia de la ciudad y refleja sus problemáticas sociales.
Nostalgia del progreso y críticas actuales al poder
La Cartografía literaria vuelve al centro de la ciudad y nos regala una mirada nostálgica y crítica, a partir de un fragmento de Pichón de diablo (2021), novela de David Eufrasio Guzmán. Pasado y presente se conjugan en el fragmento seleccionado para seguir mostrando la Medellín que se retrata en las páginas de la literatura.
Un puente que trasciende el tiempo
La Cartografía literaria nos recuerda cómo fue visto el puente de Colombia en la época de Tomás Carrasquilla. El mismo que décadas después, con otra infraestructura, aportó a la urbanización del occidente de Medellín y a la conectividad vial con Urabá.
Una revolución fallida, nostalgias y una tradición argentina
La Cartografía literaria llega a uno de los restaurantes más emblemáticos de Medellín. El escritor Juan Diego Mejía (1952) retrata en la novela Soñamos que vendrían por el mar el ambiente de la década de los 70, que atravesó a jóvenes e intelectuales.
Un intelectual, un sicario y una basílica
El turno esta vez en la Cartografía literaria es para un lugar del Centro de Medellín que el escritor antioqueño Fernando Vallejo (1942) describe en las páginas de su novela La virgen de los sicarios. Se trata de un sitio emblemático que es monumento de la nación y que hace parte de la historia de la ciudad.
De cárcel a biblioteca
Conoce un lugar de Medellín que el escritor Gonzalo Arango (1931-1976) plasmó en su libro Memorias de un presidiario nadaísta. Sobre ruinas de dolor, surgió un templo de las letras que hoy abre sus puertas a la ciudadanía y en el que los libros son sinónimo de libertad.
Iglesia San Benito
Julio César Duque comparte un fragmento de la trilogía narrativa del autor antioqueño Tomás Carrasquilla: Hace tiempos, más específicamente, de la tercera parte: Del monte a la ciudad, escrita en los primeros años de la década de 1930. El apartado citado hace referencia a la iglesia San Benito, ubicada en la comuna 10-La Candelaria, en el barrio al que este templo le da su nombre.